“Te bautizo no en el nombre del padre, ¡sino en el nombre del diablo!” De esta forma el blasfemo Ahab bautiza el arpón que debe dar fin a su níveo fantasma y sentencia prácticamente a toda su tripulación a una muerte en pos de su propio deseo de venganza.
He tenido la gran suerte de poder ver una de las últimas representaciones de Moby Dick interpretada , entre otros, por Josep María Pou en el Teatro Palacio Valdés en Avilés. Una producción impresionante de Focus
Una autentica delicia de interpretación y técnica a partes iguales, desde el primer momento trasladan al espectador a la cubierta del Pequod y que solo al final abandona de forma trágica junto con Ahab.